Del presidente : enero 2020
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La tragedia que se ha desatado en Australia durante las últimas semanas ha traído devastación a un país bellísimo. Desde WONCA hemos hecho llegar nuestro pésame a los miembros de la familia WONCA, el Real Colegio Australiano de Médicos de Familia (RACGP) y el Colegio Australiano de Medicina Rural y Remota (ACRRM).
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Los fuegos siguen devorando más tierra, más árboles y más animales mientras escribo estas palabras. Las consecuencias de lo ocurrido todavía no se entienden del todo. Estos días me han recordado un debate reciente que mantuvimos en nuestra Ejecutiva el pasado mes de noviembre de 2019, momento en el que nos pronunciamos a favor de la Declaración de Emergencia Climática a propuesta del Grupo de Trabajo de Ambiente de WONCA World.
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En su Declaración sobre emergencia climática, el Grupo de Trabajo reitera los impactos potenciales de la crisis climática sobre la salud de la población, a través de los efectos en la provisión de aire limpio, agua potable y cultivos productivos, así como los impactos derivados del clima extremo, como las olas de calor, frío y la contaminación atmosférica. Los incendios que están quemando Australia hacen que la emergencia climática sea más real para mucha gente.
La WONCA reconoce que cada uno de nosotros tiene una responsabilidad a la hora de contribuir en la reducción la emergencia climática en nuestros propios medios y de forma lo más extensa posible. En la planificación y desarrollo de las comunidades, las problemáticas derivadas de la emergencia climática están entre los temas más populares. Esta “normalización” del debate es positiva, pero no es suficiente.
Respondiendo a mi invitación, en febrero 2019, el Profesor Sir Andy Haines contribuyó con su artículo “Desde mi punto de vista” (
Leer el artículo aquí) en el WONCA News, instando de forma urgente a que todos los médicos de familia a nivel global se involucraran en la Salud Planetaria. Haines destacó la reciente publicación de la “Declaración: Llamamiento a los médicos y a las médicas de familia del mundo para que actúen por la salud del planeta” como resultado de la colaboración entre el propio Grupo de Trabajo en Ambiente de WONCA Mundial y el Grupo de Trabajo de Médicos por la Salud del Planeta de la Alianza para la Salud Planetaria (Planetary Health Alliance).
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Esta Declaración adjunta puso de manifiesto los riesgos para la salud que representa el cambio climático, pero, todavía de forma más importante, también se focalizó en las oportunidades que se abrieron para los médicos de familia, para poder intervenir en la reducción de impactos potenciales y para atajar las actuales fuerzas negativas sobre el clima.
Los médicos de familia se encuentran frecuentemente entre los primeros que tienen que responder ante desastres medio ambientales y emergencias. A pesar de todo, existe todavía una cuestión más desafiante, el hecho de que sean los mismo médicos de familia los profesionales clínicos que deben afrontar las consecuencias de dichos desastres y emergencias. La noción de “el primero en llegar y el último en irse” cobra todo el sentido en este caso. Las repercusiones físicas y para la salud mental de los desastres medio ambientales se quedan viviendo dentro de nuestras comunidades durante muchos años, afectando, incluso, a las siguientes generaciones. En ese sentido, también sucesivas generaciones de médicos de familia continúan ofreciendo su apoyo, asistencia y tratamiento.
No olvidemos, tampoco, el impacto que los desastres ambientales tienen sobre los propios médicos de familia. Los médicos y las médicas de familia no son inmunes a los riesgos entorno a los que trabajan ni a los efectos de los desastres climáticos. Sin embargo, sí que pueden ayudar a mitigar algunos de sus riesgos informando y educando a los pacientes y contribuyendo a los programas comunitarios de reducción del riesgo.
“La reducción del riesgo y la falta de preparación, a través de una activa participación comunitaria, ayudará a aliviar las preocupaciones y a asegurar que los profesionales son resistentes ante las crisis que puedan surgir. Trabajar juntos, a través de grupos interprofesionales y comunitarios, y poniendo en marcha planes estratégicos, garantiza que nuestra acción pueda ocurrir rápidamente a la hora de reducir riesgos para los profesionales y las comunidades para las que trabajan, con indiferencia de la situación de crisis a la que se enfrentan.”
El rol crucial de los médicos de familia en la reducción de riesgos ante potenciales desastres, así como ante la falta de preparación ante los mismos, es cada vez más reconocida tanto a nivel nacional como global. La formación existente para mitigar los devastadores efectos del desastre una vez esta ya ha ocurrido, o para contribuir en la prevención del desastre, es limitada y en muchos países simplemente brilla por su ausencia. A pesar de ello, estar preparados y disponer de iniciativas de reducción del riesgo son elementos clave para que las comunidades entiendan y se informen sobre las acciones que deben tomar (o no) ante diversos escenarios de emergencia.
Mientras este último desastre medio ambiental va dejando cicatrices profundas a en la bella Australia, respondamos todos y todas, como médicos y médicas de familia, con más implicación en aquellas iniciativas locales, nacionales y globales para mitigar los riesgos medio ambientales y sus retos. Como miembros fiables y respetados de nuestras comunidades, los médicos de familia podemos mejorar en la difusión del conocimiento y comprensión de los riesgos y podemos, desde nuestras consultas y compromiso social, explicar dichos riesgos y oportunidades para mitigarlos.
La incidencia de los desastres medioambientales va en aumento. Nadie quiere asustar. Pero quedarnos callados a esperar a que los cambios en el medio ambiente no supongan un riesgo real e identificable sería imperdonable. Desde pequeñas acciones individuales y ante las oportunidades para hacer más políticas, los médicos de familia tenemos la responsabilidad y la oportunidad de alzar la voz por la salud de nuestros pacientes y los riesgos a los que se enfrentan.
Donald Li
Presidente de WONCA Mundial